Piensa en los hábitos más importantes de tu vida: comer, dormir, trabajar, pasar tiempo con tus seres queridos. Todos son esenciales para tu bienestar físico, mental y emocional. La oración se sitúa en esta misma categoría, pero a un nivel espiritual. Cuando la oración se convierte en un hábito, ocurre algo profundo:
¿Cómo Empezar a Crear este Hábito?
No necesitas largas horas al principio. Lo importante es la constancia y la sinceridad. Aquí te doy algunas ideas:
Crear el hábito de orar es una inversión invaluable en tu vida espiritual. Es el camino hacia una relación más profunda y auténtica con Jesús, quien nos espera siempre con los brazos abiertos. ¿Estás listo para dar el siguiente paso en este hermoso viaje de fe?
¿Te gustaría explorar más sobre alguna forma específica de oración o cómo superar desafíos comunes al orar?
Dejar mi comentario